Sabemos que Sonorama Ribera no es solo un festival de música, es un motor económico y cultural para Aranda de Duero. Un estudio del Departamento de Economía de la Universidad de Burgos (UBU) ha cifrado en 23,7 millones de euros el impacto económico de la edición de 2024, resaltando su papel en la creación de empleo y la promoción de la comarca a nivel nacional. Además, el informe destaca cómo el evento posiciona a Aranda como un referente en el mapa de festivales de España, reforzando su identidad local y atrayendo turismo.
A lo largo del estudio se han analizado los efectos en sectores como hostelería, comercio, transporte y servicios, además del impacto indirecto en proveedores y empresas vinculadas a la organización del festival. También se han recogido datos sobre el gasto de los asistentes, que deja cifras muy significativas para la economía local.
Pero, ¿cómo se desglosan estos 23,7 millones de euros? ¿Qué papel juegan los asistentes en este impacto? Vamos a verlo.
Un festival que mueve la economía local
El informe de la UBU, firmado por Paula Antón Maraña, Julio César Puche Regaliza y Pablo Arranz Val, no solo analiza los ingresos generados de forma directa, sino también los efectos indirectos e inducidos en el entorno. Esto incluye el gasto en alojamiento, restauración, transporte, ocio y comercio.
Según datos previos, cada asistente gasta una media de 80 euros en alimentación y bebidas fuera del recinto, 47 euros en transporte y 44 euros en compras en tiendas locales. Esta inversión se traduce en una importante inyección económica para Aranda y la comarca de la Ribera del Duero, con beneficios que van más allá de los días del festival.
Esta repercusión económica también se nota en la generación de empleo. Durante el festival, la demanda de personal en hoteles, bares, restaurantes y comercios se dispara, permitiendo contrataciones temporales que suponen una fuente de ingresos extra para muchos trabajadores.
Sonorama pone a Aranda en el mapa de los festivales nacionales
Más allá del impacto económico, Sonorama Ribera se ha convertido en un escaparate cultural para Aranda de Duero. La afluencia de público de toda España y la cobertura mediática contribuyen a proyectar la imagen de la comarca como un destino turístico y cultural de primer nivel.
Este posicionamiento no solo favorece la llegada de visitantes durante los días del festival, sino que también impulsa el turismo en otras épocas del año. La promoción de la gastronomía local y el enoturismo ligado a la Ribera del Duero son factores clave que refuerzan este atractivo.
El festival, además, fortalece la identidad local, ya que es un evento en el que participan activamente los vecinos, negocios y entidades de la zona. Sonorama Ribera no solo es música: es una experiencia que involucra a toda la comunidad.
Sonorama Ribera 2025: expectativas en alza
Con estos datos sobre la mesa, las expectativas para Sonorama Ribera 2025 son altas. La cita sigue creciendo en relevancia y consolidando su papel como uno de los festivales más importantes del país. Con cada edición, Aranda de Duero refuerza su estatus cultural y turístico, convirtiéndose en un destino imprescindible para los amantes de la música en directo.
Si el impacto de 2024 ha sido tan positivo, la pregunta es clara: ¿conseguirá Sonorama Ribera 2025 superar estas cifras? ¡Todo apunta a que sí!
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Mired es una periodista y crítica en la escena musical independiente que aporta a Todorama.es su pasión por la música indie. Reconocida por sus análisis rigurosos y su habilidad para descubrir talentos emergentes, Mired aporta un contenido que refleja su experiencia, autoridad y confiabilidad. Síguela para descubrir tendencias y las novedades de Sonorama.
